Tras las elecciones
30 de julio 2023
He recordado una afirmación de Miller en un artículo: «El Psicoanálisis, la ciudad, las comunidades», donde dice que… finalmente, «toda la historia humana es una conversación»1.
La frase empezó a reverberar en mí y me puse a pensar en las recientes elecciones. Como también estaba buscando tema para las Jornadas y me había tropezado con el neologismo y el neo-semantema me dio por pensar qué tipo de conversación había sido la previa a las elecciones y qué efectos había tenido. Sabemos del uso prepotente de la mentira y sabemos que algunos mentían y gozaban de ello y de eso nos dábamos cuenta. Algunos otros, más o menos silenciosos parecíamos difusos y aún no estando de acuerdo con el discurso de la derecha en el que los gestos intentaban disimular la ausencia de ideas y las indisimuladas ansias de poder, no sabíamos cuántos estaban dormidos por la propaganda y cuántos no. Una coyuntura que nos confrontó con la inexistencia del Otro. Sin duda, había temor, el temor de caer de nuevo en las manos de la ultraderecha.
Si la historia humana es una conversación, habría sido esta, inopinadamente, una conversación cuyo calor animó y despertó la atención de los oyentes.
Quizá, el de los lacanianos particularmente por ocuparnos de lo que hablar quiere decir, y porque no nos olvidamos de lo que el hablar quiere gozar.
O acaso no ha sido el calor, ese calor sofocante que fue tomando la conversación política preelectoral el que animó y despertó la atención de los oyentes sensibles a lo que al hablar quiere gozar.
Araceli Fuentes,
psicoanalista en Madrid
arafuentesgr@gmail.com
Notas:
- Miller J.-A., “El psicoanálisis, la ciudad, las comunidades”, El Psicoanálisis, 37, Bilbao 2021, p. 25. ↑